El Lipoláser en papada, cara y cuello se realiza mediante el uso láser. En el caso de la papada se aprovecha un láser con dos tipos de longitud de onda:
- 924 nm que sirve para derretir la grasa localizada.
- 975 nm con el que se consigue contraer la piel, mediante un proceso de calentamiento de los tejidos.
En el caso del Lipoláser en cara y cuello se realiza una reducida incisión tras infiltrar anestesia local tipo Klein. Por esta incisión se introduce la fibra óptica que, al entrar en contacto con la grasa, la derrite.
La grasa derretida se extrae con una cánula de liposucción, que en el tratamiento que ofrecemos en IML es más fina que las tradicionales.
Finalmente, el médico especialista introduce de nuevo la fibra óptica para proceder a un calentamiento de los tejidos, que produce la contracción de la piel.