Otras técnicas específicas
En IML Clinic contamos con distintas técnicas para la rosácea.
Afección inflamatoria de la piel que se manifiesta en mejillas, mentón y frente.
Se caracteriza por el enrojecimiento y rubor transitorio o permanente en la piel. A medida que evoluciona puede dar lugar a la aparición de capilares más dilatados, pústulas y pápulas. En la rosácea es muy habitual periodos intermitentes en los que aparecen y desaparecen los síntomas.
Se considera que las causas de la rosácea guardan relación con una cascada de alteraciones en la que participan la infección, la respuesta inmunológica y la alteraciones de los microcapilares probablemente por mediación de agentes mediadores de la vasodilatación.
El primer paso para poder recomendar un tratamiento es definir el tipo de rosácea tiene el paciente, existen 4 tipos:
La rosácea es más frecuente en personas de más de 30 años y en pacientes de piel clara y fina.
El paciente puede encontrar en IML importantes mejoras de los brotes de rosácea gracias a los tratamientos con láser que realizan nuestros dermatólogos. El tratamiento con láser de la rosácea tiene dos aplicaciones:
El tratamiento con láser suele realizarse en combinación con otros tratamientos de apoyo como antibióticos, retinóico, preparaciones sulfuradas, metronidazol y otros.
Si bien el tratamiento definitivo para la rosácea no existe, podemos mejorar su clínica y reducir el número de brotes. Dado que la rosácea empeora con el tiempo, es recomendable que se inicie un tratamiento lo más precoz posible.
El tratamiento de la rosácea requiere evitar factores desencadenantes como por ejemplo:
Para más información, solicita una consulta informativa sin coste con uno de nuestros dermatólogos expertos en tratamientos de rosácea.