Peeling químico en Madrid

El estudio de cada paciente y la elección de las sustancias y el tipo de peeling a realizar para elegir el mejor tratamiento posible representan la primera fase del proceso.

A continuación, se aplican dichas sustancias, extendiéndolas en capas muy finas por las zonas que se vayan a tratar. Deben dejarse durante unos minutos, para que actúen sus efectos sobre la piel.

El paciente está cómodo en todo momento y sin molestias. Dependiendo del tratamiento de peeling químico, sí es posible notar una sensación ligera de calor o picor.

Tras haber dejado tiempo para que actúe, se retira la sustancia y se aplica un protector solar y cremas calmantes y refrescantes, con efecto también hidratante. Es posible también utilizar maquillaje, en los peelings que son más superficiales.

El peeling químico que ofrecemos en IML es hoy en día uno de los tratamientos que más ha avanzado en el sector de la medicina estética.

Su evolución ha permitido incluso contar con productos que pueden ser utilizados hasta en verano.

También se ha conseguido mejorar en los tratamientos, actuando en las capas que están a mayor profundidad en la piel, consiguiendo así resultados más eficaces.

Esta evolución del tratamiento permite aprovechar el peeling químico con menor cantidad de principios activos y reducir posibles efectos secundarios tras su aplicación como enrojecimiento de la piel o irritación.

El peeling químico tiene como ventajas adicionales ser un tratamiento que se aplica con bastante rapidez y cuyos efectos se ven al poco tiempo. El paciente, además, puede volver a su rutina diaria inmediatamente después del tratamiento.