La pérdida de lubricación junto con la atrofia vulvar y vaginal dan lugar a una falta de hidratación de la región vaginal que da lugar a sequedad y falta de elasticidad que puede condicionar de forma marcada las relaciones íntimas de la pareja.
Normalmente, la sequedad vaginal se produce como consecuencia de la aparición de la menopausia o la perimenopausia en la que se produce una bajada de los niveles plasmáticos de estrógenos y que conducen a una serie de efectos que son:
- Se produce atrofia vaginal de todas las capas que constituyen la vagina.
- Aparece un claro adelgazamiento de las paredes de la mucosa vaginal y también se produce atrofia de la mucosa vulvar.
- La atrofia vaginal y de la mucosa cursa con una pérdida de lubricación y con una pérdida de la elasticidad de los tejidos.
La menopausia aparece en una edad relativamente temprana en la mujer dado el aumento de la esperanza de vida. A la mujer le queda mucha vida activa y sana por delante y es importante que no vea mermada su capacidad para tener relaciones sexuales placenteras y que su vida íntima no se vea condicionada por la sequedad vaginal.