La posición, el tamaño, la simetría y el contorno de las areolas influyen en la percepción estética de las mamas. La reducción de areolas es un tratamiento que se puede plantear cuando las areolas son más grandes de lo deseado o presentan una asimetría suficientemente evidente.
La piel de las areolas puede distenderse y hacer las areolas de un diámetro mayor al deseado. También se puede presentar un mayor tamaño de las areolas de forma constitucional. En estos casos se puede realizar una reducción de areolas.
Es bastante habitual que la paciente presente las areolas de mayor tamaño cuando tiene un pecho grande y distendido o cuando se ha producido una flacidez de la piel de las mamas como consecuencia de un aumento brusco del volumen del pecho como ocurre en la lactancia o de bajadas intensas de pecho que hacer perder volumen al pecho después de haber estado su piel distendida por su mayor volumen.
En algunos tipos de mama como la mama tuberosa es bastante frecuente que las areolas presenten un diámetro mayor al deseado y casi siempre se realiza una reducción de areolas combinado con el aumento de mama y la corrección de la mama tubular.
También se puede realizar reducción de areolas cuando la paciente presenta asimetría en las areolas, de forma que una areola se muestra más grande que la otra. Para obtener un resultado estético más armónico es posible realizar la reducción de areolas solo en una de ellas para embellecer el aspecto estético del pecho.
Normalmente se considera que las areolas son más estéticas cuando tienen un diámetro entre 3.8 y 4.2 cm y es el tamaño de referencia que se suele emplear cuando se realiza una reducción de areolas. Al hacer el tratamiento conseguimos un pecho más estético, una simetrización de las areolas y unas areolas más juveniles, ya que estas suelen ser de menor tamaño.