En Instituto Médico Láser ofrecemos tratamientos para la incontinencia de orina o incontinencia urinaria, es decir, la pérdida de control sobre la micción.
La incontinencia de orina es patente cuando se realiza algún esfuerzo que, ni siquiera tiene que ser excesivo, como por ejemplo agacharse o saltar. Este problema puede aparecer tanto en pacientes jóvenes como de mayor edad.
Los ejercicios de suelo pélvico de Kégel pueden ayudar a mejorar la situación, aunque la forma más efectiva de tratar casos leves de incontinencia urinaria es con un tratamiento de láser. En ocasiones complementado con mallas suburetrales colocadas con anestesia local.
La incontinencia de orina tiene tratamiento y este depende de la tipología que presente el problema en cuestión, por eso es importante un diagnóstico completamente personalizado a las necesidades de cada paciente.
La mejora de los tratamientos para incontinencia de orina con láser, permite contar actualmente con soluciones efectivas, tanto en pacientes con incontinencia leve como moderada. Estos tratamientos básicamente buscan regenerar los tejidos de la zona, para que puedan desarrollar su función correctamente.
También contamos con tratamientos quirúrgicos para la incontinencia de orina. Consisten en la colocación de mallas o de bandas, que son las responsables de realizar una función de sostén en la uretra.
Para los tratamientos urgentes de incontinencia urinaria, se utiliza medicación, con la que normalizar la respuesta de la vejiga hiperactiva.
En el caso de incontinencia por rebosamiento, el tratamiento normalmente es el mismo que en los pacientes con patología de base.
En IML aplicamos tratamientos para pérdidas de orina tanto de tipo leve como moderado, mediante el uso de láser de CO2. Es un tratamiento realizado de forma ambulatoria, sin anestesia y sin cirugía.
Con este láser conseguimos vaporizar las capas más externas de la cara anterior de la vagina y estimulamos la formación de nuevo colágeno, que es el responsable de contraer los tejidos que están rodeando la uretra.
Gracias a que aumentamos la firmeza en estos tejidos, la paciente consigue controlar la micción de nuevo.
En algunos casos podemos considerar la combinación del efecto del láser con mallas suburetrales, que también se pueden poner sin anestesia en un tratamiento ambulatorio.
Este problema puede aparecer tanto en pacientes jóvenes como de mayor edad. Normalmente se asocia a algunas de estas situaciones:
En IML normalmente realizamos el tratamiento de orina en 2 o 3 sesiones. Además, recomendamos sesiones de recuerdo de forma temporal, cada 6 meses o cada año. Todo depende también de las propias condiciones físicas de la paciente.
Una de las ventajas adicionales de nuestro tratamiento para la incontinencia urinaria es que carece de tiempo de recuperación. La paciente puede retomar su vida normal de forma inmediata tras cada sesión. Sí es recomendable evitar relaciones sexuales los siguientes 5 o 7 días.
La pérdida de control de micción puede deberse a muchos motivos. Estos son los más frecuentes:
Nuestros ginecólogos expertos analizan las características personales de cada paciente, para encontrar el mejor tratamiento posible. Entre la información que pueden solicitar está normalmente la siguiente:
Este análisis de cada paciente puede ayudarnos a identificar mejor la tipología del problema de incontinencia que sufre.
La pérdida del control de micción tiene distintas tipologías e identificar cuál corresponde a cada paciente es imprescindible para un diagnóstico y posterior tratamiento efectivos:
Incontinencia urinaria de esfuerzo
Pérdidas de orina sufridas cuando se realiza algún movimiento como estos:
Normalmente se sufre en estas condiciones un defecto del esfínter uretral.
Incontinencia urinaria de urgencia
Se produce por una hiperactividad del músculo detrusor de la vejiga. Como consecuencia, la paciente no pueda contener el impulso de miccionar. Esto le provoca una sensación urgente o de escape inminente, que no puede controlar.
Incontinencia urinaria mixta
Es una combinación de la sintomatología de los tipos de incontinencia previos, la de esfuerzo y la de urgencia.
Otros tipos de incontinencia
En la práctica, hay más tipos de incontinencia urinaria y cada una puede requerir un tratamiento distinto.
La incontinencia por rebosamiento, por ejemplo, suele relacionarse con enfermedades que afectan al control de la micción, más concretamente a las funciones del sistema nervioso y periférico que se encargan de ella. La paciente no puede controlar la micción y se producen escapes en cuanto la vejiga alcanza el máximo de su capacidad y «rebosa», de ahí la relación con este concepto.
Otra incontinencia muy frecuente es la relacionada con el embarazo, que puede provocarse principalmente por dos razones:
En IML ofrecemos un tratamiento personalizado a cada paciente, para poder alcanzar sus objetivos con éxito y de forma efectiva.
Solicita ahora una consulta informativa gratuita y nuestros expertos en IML podrán ofrecerte un diagnóstico específico y el mejor tratamiento para problemas de incontinencia de orina.